Buf, qué caritas teníamos algunos y qué tet... digo carita tenían otras!!

Al llegar a mi kely sólo podía pensar una cosa:
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo,
voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo, voy pedo...