Lo había leido en multitud de ocasiones, me lo habian contando. Pero el sabado lo vi en directo. Impresionante, que disparate la pura obsesión de alguien sin sentido.
Si todo el esfuerzo y el tiempo que se ha dedicado a destrozar un camino y todo el terreno que lo rodea, se hubiera dedicado a buscar la forma de adecuar el uso publico del camino dentro de la finca todos hubieramos ganado. Empezando por el campo y terminando por el impresentable que ha destrozado un sitio espectacular.
En fin espero que las autoridades tomen nota. Yo voy a seguir pasando.
Saludos...